Esta obra fue realizada por Juan Manuel Villarruel, Gustavo Feldman y Juan Pablo Caballero. En palabras de Pedro Nestor Sagües, esta obra que emerge a poco de haberse lanzado el instituto del Defensor del Pueblo, resulta indispensable conocerlo, divulgarlo y encuadrarlo. Los autores han seguido una técnica que exhibe un criterio práctico y realista, desmenuzando exegéticamente el articulado de la ley 10.396. Así, el acceso a la temática es simple y concreto, dos cualidades no siempre presentes en la literatura jurídica.